Juan Carlos Silvestre fue, una vez más, el más rápido en la prueba de slalom que abrió la temporada de la especialidad en la comunidad Navarra. El ya habitual circuito del Polígono Industrial de Villatuerta reunió a un total de 17 pilotos y a un nutrido grupo de aficionados que jaleó sin descanso a los participantes en una tarde soleada pero fresca, lo que, sin duda, fue agradecido tras una semana de climatología adversa.

Pese a que la clasificación final englobó a todos los pilotos, la organización entregó trofeos y premios en metálico por separado a los conductores de turismos y de monoplazas, diferencia que, como se puede comprobar, resulta acertada al observar los tiempos de la general.

Dentro de los monoplazas, y tras el dominio incontestable de Juan Carlos Silvestre, se colocaba, a cinco segundos, José Antonio Azanza y a seis David Fernández, aunque éste último tuvo que hacer bueno su tiempo de la primera manga ya que rompía la cadena de su Silver Car en el momento de tomar la salida en la segunda. Destacable asimismo fue la actuación del riojano Luis Ángel Muñoz, autor del segundo mejor tiempo en entrenamientos y en la segunda manga, posición de la que se vio desplazado merced a una penalización. David Berasáin también realizó una buena carrera, aunque el ímpetu y las penalizaciones le impidieron una mejor clasificación.

El a la postre vencedor en la categoría de turismos, David Azcona, se las tuvo que ver y que desear para lograr el triunfo frente al las buenas maneras presentadas por Barandalla, quien se veía desplazado al segundo puesto del cajón por la mínima diferencia de cuatro centésimas. Fernando Viadero fue tercero merced a una magnífica segunda manga, seguido del Opel Corsa de Antontxo, necesitado de una urgente revisión, mientras que Ángel Espada tenía que conformarse con la quinta plaza, después de doblar el puente trasero de su vehículo contra un bordillo.

Cabe destacar que, como ya es también costumbre en los slaloms organizados por la escudería Urbasa, se sorteó un jamón entre los espectadores que habían contribuido con la organización mediante el pago de la correspondiente entrada. En esta ocasión, y por primera vez en toda su trayectoria, Urbasa entregó tan preciado galardón al primer sorteo, no haciéndose necesario el relevo de la llamada “mano inocente”.

Responsables de la escudería confirmaron su intención de organizar otra carrera más en el trazado de Villatuerta y de repetir la experiencia del motorshow en Pamplona, ambos en el mes de diciembre. También apuntaron su interés en celebrar un cuarta carrera en alguna población de la ribera, comentándose la localidad de Tudela como posibilidad.